jueves, 18 de febrero de 2021

A GOLPES DE RAP Y ENGAÑO

Después de un año en blanco, vuelvo a retomar la pluma para, en este caso, dar testimonio de una degradación que, cada vez más, afecta a nuestro sufrido país. Dejo la línea humorística para otro momento más apropiado. Casi lo prometo.

Abusar de un país que está maltrecho

por tanta demagogia, y peste china,

es cobarde, falaz y de mezquina

condición inhumana. No hay derecho

 

a que una turba, sórdida moralla,

rastrera, oportunista, e incontrolable,

usurpe la palabra, ni a que hable

de dictadura, y de opresión canalla.

 

Ayer fue la defensa de un villano

que desertó, cual Capitán Araña.

Hoy enaltece a ultranza a ese rapero

 

que canta con los vientos de su ano,

y apesta las “narices” de una España

que aspira a ser jardín, no estercolero.